jueves, 30 de diciembre de 2010

Cerrando


En Caminos de Guerrero es importante al final del mismo realizar una recapitulación sobre todo lo vivido y trabajado a lo largo de los meses que dura el trabajo.

Se trata de simplemente de repasar cada uno de los puntos vividos y experimentados personalmente para de esta manera tratar de cerrar el trabajo y a la vez intentar hacer consciente lo que ha supuesto para cada uno de nosotros.


Es simple, pero es necesario hacerlo y a la vez ser sincero con uno mismo viendo hasta donde hemos llegado. Haciendolo así, de alguna manera se sella la Experiencia y a su vez es un Impulso para seguir trabajando sobre todo ello en la vida cotidiana ya que si bien Caminos del Guerrero está limitado en duración, el trabajo no puede tener fin y se trata de integrar la Experiencia aprendida en el día a día para que esto realmente sea útil y no se quede en algo perdido en el tiempo y que se acaba olvidando...


Esto, para mi, sin duda es muy útil y a la vez te da pistas sobre ti mismo en lo que de alguna manera te toca seguir trabajando y Caminando en lo que es la propia Vida.


Hay que aprender a cerrar Ciclos aceptando las situaciones, lo que consideramos importante y lo que no lo es, ajustando la realidad a los hechos y no a las ideas o intenciones que tengamos por muy buenas que sean.


Darme cuenta de este detalle, para mi ha sido una de las importantes enseñanzas que he obtenido en este nuevo ciclo de Caminos del Guerrero.


También que el Tiempo pasa.... que hay que tomar ciertos Riesgos y el Enfocarse sin dispersiones es un Riesgo que hay que asumir si realmente no queremos que la propia vida acelere su paso y solo seamos meros espectadores pasivos sin ni siquiera tener la oportunidad de escarbar un poco en nuestro propio Yo para al menos, tratar de vivir la vida de una manera un poco más armónica con todo lo que nos rodea y con la Madre Tierra.


Gracias por la oportunidad de haber podido escribir estos posts en este diario, con la intención de que, de alguna manera sirvan para vislumbrar sin contar detalles, lo que significa el trabajo en Caminos del Guerrero.


Gracias a la Madre Tierra porque siempre está ahí y nos permite Caminar sobre Ella con Respeto, Amor, Silencio y Agradecimiento.


Da

sábado, 24 de julio de 2010

Futbol y Conciencia


Hace unos días el dirigente más famoso me dijo el primer día que del fútbol viven 40 millones de personas en el mundo, es decir, que trabajan honradamente. Quizá no sea tan malo.

El que allí observaba me dijo que el jugador bueno no mata, ni trafica con drogas, personas o armas. El hecho es que golpea un balón. Nada más. Idem el jugador malo.

El más desapegado me dijo que el dinero no es malo y que uno lo usa para lo que quiere. Y algunos lo usan para la ayuda en porcentajes mayores de su sueldo que la mayoría de nosotros.

El jefe de prensa resulta que era experto en terapia del trauma. Qué sorpresa. Y también trabajaba en el fútbol. 

El padre de un futbolista de la selección española es  mi paciente. Y se trata con fitoterapia natural toda su familia.

El fisioterapeuta más nombrado es un gran acupuntor y devoto del Qi. Y medita en los templos en su país.

Un miembro de la comisión de árbitros es un reputado psicólogo y ayuda a desfavorecidos en su ciudad.

En el estadio vi a  obreros, abogados, ingenieros y médicos, cantantes, artistas, secretarias, cocineros… todos están allí. 

Algunos tienen conciencia social y otros menos. Pero no la tienen por estar o no estar allí. 

El Coliseo siempre existió y es una terapia para el pueblo. Terapia barata, probablemente inútil, para mi ciertamente aburrida… pero para el pueblo necesaria. 

La psique necesita la implicación tanto como el escape. 

Como necesita de un Rey fuera mientras no encuentre el Rey dentro, o un Santa Claus que trae regalos del cielo mientras no encuentre los regalos dentro. 

No es de alta consciencia juzgar otra consciencia. Lo que existe es y es Real. 

Es más sensato darse cuenta de que lo que existe, para el mundo tienen sus motivos por extraños o duros que nos resulten.

No es de alta consciencia creer que una conciencia anula otra. Mirar un mundial no te aleja de la realidad ni de la ayuda ni de lo necesario. Te alejas tú, mires o no mires un mundial. 

No me despiertes llamándome débil dijo la sombra.

Si me abrieran el cerebro encontrarían…


Si me abrieran el cerebro encontrarían nada...

 No hay nada mágico ahí ni nada especial. Nada por lo que vaya a triunfar o conseguir algo.

Nada que pueda conquistar un corazón, vivir una vida de sueño, o hacer feliz a alguien.

 Nada por lo que puedas sentirte distinta, nada por lo que me puedas conseguir como gran amigo.

 Nada que pueda servir de ejemplo a otros, inspirar vidas o crear ideas.
 Mucho menos hay allí algo que pueda salvar a la humanidad o avanzar en la conciencia.

 Si me abrieran el cerebro no encontrarían algo que no te defraude o te dañe.
 No hay nada que te pueda ilusionar, o que puedas decir que ser más lindo. 
 Nada que puedas sentir que soy único, especial o maravilloso. 
 Nada por lo que alguien deba quedarse o acompañarme.

Nada por lo que me tengas que darme tu corazón o compartir tus sueños. 
 Ya quisiera yo todo eso, pero no tengo de eso.

Ahora lo veo claramente, sin tanta tristeza… Aunque todavía no soy humilde. 

 “Si me abrieran el cerebro encontrarían un gran guante de boxeo. Es todo lo que soy”


Marvin Marvelous Hagler, ex – campeón mundial de los pesos medios.

Cortar


Llevo  meses de lucha interna.
 
Observo como este trabajo está presente a diario en mi.

No es sencillo y se acaban dando la vuelta a muchas cosas:
Desde como te relacionas con las personas cercanas
a como dejan de tener sentido relaciones emocionales
que desgastan mucho o observar como uno mismo se acaba
buscando mil excusas para no afrontar el trabajo que de alguna
manera te ha demostrado que es eficaz a la hora de tener
cierto crecimiento interno.

Cuando de alguna manera uno tiene muchas inquietudes internas
cuesta de alguna manera apostar por una de ellas y estar lo más
centrado posible.

Parte de mi trabajo este año, es llegar a este punto y darme cuenta
que necesito ser selectivo.

El tiempo pasa rápido y hay que aprender a identificar cuales son
las cosas importantes que uno quiere en la vida y apostar por ellas.

Sino, por lo que la experiencia me ha demostrado, en concreto, estos
últimos meses, surgen muchas "cabezas" con muchos "tentáculos"
 y te pasas la vida cortándolos. De esta manera los días pasan, no te
enteras.... y todo sigue más o menos igual.

Creo que estos dos meses han sido un trabajo para tratar
de identificar todo ello y buscar la manera de aprender a cortarlos.
No es facil,  queda mucho camino por recorrer ya que las
inquietudes son muchas, pero creo que un paso importante para mi,
el haber reconocido y llegado a este punto.

Lo que tengo claro es que las caminatas solitarias en silencio, las salidas a la
montaña, el contacto con la Madre Tierra, sin ninguna duda, me han
ayudado a darme cuenta de ello, simplemente observando mi propio
estado antes y después de las mismas y eso sin duda, es algo
que tiene mucho peso y valor.

Ahora toca Cortar, aprender a cerrar ciclos, con personas, con situaciones cotidianas,
con rutinas...y en resumen, conmigo mismo.

Da.

sábado, 3 de julio de 2010

La práctica agradable



Al inicio la práctica agradable es importante. La buena postura, la respiración profunda y la técnica correcta. Nos sienta bien y nos gusta. Nos relaja y aparcamos los problemas cotidianos. Nos da identidad y por un rato sentido. Podemos elegir nuestra práctica. Nos sentimos libres. Sonreímos pero no sabemos lo que esconde. La práctica agradable es finita.

Al final la práctica sagrada es la verdadera. Austera, sin nombres, sin etiquetas, siempre incómoda, lejos del apego y rechazo, y del me gusta me disgusta. Nunca acaba ni se conforma. Vive en el caos. Es infinita. Es el jaguar de la noche. Sólo la práctica sagrada entiende el vacío debajo de las formas.

viernes, 25 de junio de 2010

La energía sin nombre


Autentico vivía en la montaña con la naturaleza como parte de su vida. A la noche nada más cerrar sus ojos un mundo de sueños se abría ante él. A veces despertaba en ellos por pura presencia y a veces le despertaban las primeras fuerzas ocultas del nuevo día. Aún oscuro, caminaba hacia arriba, dejando que el aire fresco revelara el vacío interior. Al llegar arriba y ver las primeras luces Auténtico se quedaba quieto… dejaba sus piernas descender a la Tierra unos centímetros y sus brazos volar hacia la luz. Miles de hormigueos recorrían su cuerpo. Al inicio en la superficie, luego en el interior, cada vez más profundo y ahora, años después, Auténtico sentía que ese hormigueo estaba en cada planta y en cada ser de la montaña. Según la luz, el viento o los rayos del alba un micromovimiento, de vida en la quietud, se instalaba. Auténtico hacía por sí mismo, fiel a su propia naturaleza, sólo al dictado de la Gran Vida. Amigo de lo oscuro minutos antes, rendido a la Luz rato después. Allí pasaba el tiempo, media hora, una hora, dos horas… con vibraciones que acababan en danza libre, en canto al valle o en viajes de conciencia haya donde ésta podía rellenar espacios dormidos de sus hermanos. Tocaba entonces recogerse y seguir con lo cotidiano, prendido de practicar con lo que Es.  


 Y así Auténtico procedía, día a día, mes a mes y año tras año. Sin rutinas… instalado en el cambio perpetuo del Ahora.


Abajo en el valle, Taoísta y Budista  con las legañas pegadas y los ruidos de la gran ciudad le miraban y exclamaban: “Ah, ¡¡un maestro!!” “Un Maestro Taoísta” decía Taoísta. “Un Maestro Budista” decía Budista. Aún semi dormidos, lastrados por el aire sucio, las mentes densas y el ritmo alocado, miraban las posturas de Auténtico. 


Budista no creía en lo espontáneo aunque no sabía porqué y se fijó en su quietud. Doblo sus piernas en vez de descender desde lo profundo a la Tierra y alzó sus brazos arriba en vez de dejar que flotaran como nubes por la fuerza del pulmón. Y ahí se quedó, quieto, rígido, sin saber qué hacer con la vida interna… pues ésta sabía a poco. Creó colores e imágenes a la que añadir a su meditación de pie. Pintó de verde sus piernas, de rojo sus brazos y quiso que sus chakras giraran en sentido determinado. Para alimento de su mente, se inventó una respiración abdominal  para la postura… muy terapeutica decía. Cuando miraba hacía frío a esas horas y después de ver a Auténtico allá arriba, se permitió practicar para siempre en un lugar cómodo, cálido, con bellos yantras, aromas de incienso y trajes de seda… pues esos eran seguro los compañeros de Auténtico. 


Taoista sí creía en lo espontáneo aunque no sabía porqué y se fijó en el movimiento. Intentó copiar a Auténtico una y otra vez y pareció entrever que ciertas secuencias se repetían cada mañana. Así Taoísta pudo recoger la kata del maestro de la montaña. Abajo en la ciudad Taoísta movía su cuerpo. Se dio cuenta que los movimientos seguro canalizaban la energía y abrían los canales, aquellos en los que dicen se instalan los bloqueos y las enfermedades. Supo del jing, del qi y del shen y dedujo que la kata libre de Auténtico servía para tal fin. Pero el movimiento en sí, a pesar de provenir del maestro de la montaña,  no era suficiente, así que imaginaba grandes burbujas de luz que le rodeaban y limpiaban, recorridos por distintas órbitas y bellos colores para su pulmón, hígado, corazón, bazo y riñón en los que viajando por ellos, contaba, se iban todos los males, incluso los que respondían a las causas que no vemos. Llenó su lugar de práctica de colores y dibujos del gran Tao, aquel que no puede ser nombrado pero que Taoísta siempre relataba.


Fundaron dos Escuelas para hombres de ciudad, con muchos acólitos, palabras dulces, relajadas y prácticas internas… tan internas que jamás visitaron el frío, la tormenta, la lluvia, la noche oscura, el viento o el agua en su estado natural… elementos…

Auténtico aún practicaba en la montaña.

sábado, 19 de junio de 2010

Lo que trato de olvidar


Un joven practicante de artes marciales y meditación caminaba todos los días hacia su Dojo de entrenamiento varios kilómetros. A la ida y a la vuelta pasaba por la casa de un supuesto maestro. Cada vez que pasaba por allí el joven cambiaba su postura y apretaba los músculos. El maestro bebía té. 

El joven ideó diferentes estratagemas para llamar la atención del maestro. Portaba sus libros y al pasar delante del maestro empezaba a leerlos en voz alta. El maestro sonreía y bebía té. 

Otro día decidió pasar a la acción y hacer movimientos de sus formas delante de la casa del maestro. El maestro escuchó ruidos y al ver al joven se dio la vuelta a buscar su té.  

El joven no se desanimaba y decidió hacer posturas de meditación y potentes mudras al pasar por la casa. 

Así día tras día sin captar la atención del arisco maestro. 

 Un día el joven decidió preguntarle: “Siempre que paso por su casa le muestro mi práctica, mis libros, mi conocimiento, mis katas y mis posturas, pero usted, que supuestamente es un maestro no dice ni hace nada. Creo que usted no es lo que otros manifiestan”

El maestro contestó: “¿No te das cuenta de que lo que tu tratas de recordar es lo que yo trato de olvidar?”

sábado, 12 de junio de 2010

El Cambio es Ahora


¿Quien les dijo que iba a ser fácil?
¿Acaso tiene que ser bello o agradable?
¿O esperaban que fuera cómodo?
¿Acaso creen que el próximo mes o año será un mejor momento?

¿Te das cuenta… o duermes todavía?

¿Sabes la energía que perdiste durante 20, 30, 40, años por suponer y volar del ahora?
¿Sabes cuanto del ayer aún te maneja?
¿Sabes todo lo que te has perdido?

¿Lo puedes imaginar?

¡¡ Gentes, amores, risas, vivencias, experiencias... ¡¡

¡¡¡ VIDA !!!

Pero, ¡!opuestas a las que imaginaste por protegerte!!

¿Puedes recuperar los besos que no diste? ¿Las miradas que no viste?
¿Las palabras que no dijiste?
¿Aquellos que se fueron y de los que no estabas despedido?
¿Sabes lo que pierdes al ver lo nuevo con los ojos del pasado?

¿Los besos que te perderás?
¿Las miradas que no verás?
¿Las palabras que te guardarás?

¿Sabes que así castigas al infinito y te pones encima de la Vida?

¿No tienes tiempo? Dímelo en voz alta. ¡Grítamelo si puedes!
Díme que no es necesario, dime que no es primordial.
Díme que en medio del caos no puede hacerse.

¿O acaso es la mejor situación?

Y si no es Ahora…, ¿Cuándo?

El fantasma



A veces me gano la vida visitando gente, la mayoría de ocasiones sin motivo. Un día me llamaron para visitar a una familia que reconocía su desesperación. Vivían en un gran castillo.

En medio del campo se erigía majestuosa la construcción. La familia ocupaba la mitad de la mansión. Parecían vivir felices ocupando una cuarta parte del espacio… sin embargo reconocían que la insatisfacción interna iba creciendo cada día.  

Me encontraba en un gran castillo semi vacío. Con el paso de los días sentía porqué la familia no estaba en paz. Debajo de las palabras un silencio aullaba, detrás de las sonrisas una tristeza me miraba, escondido entre las buenas formas la culpa gritaba y cuando lo urgente salía de la chimenea ellos miraban el futuro en el horizonte abriendo la ventana. En esa parte del castillo parecía haber una orquesta.., la orquesta del secreto.

En el espacio confinado y habitado reinaba la luz y la comida, las entradas y salidas, el movimiento y el alboroto, todo tapaba la orquesta.

Pregunté qué había al otro lado del castillo y me dieron más comida, mejor cama y me invitaron a bailar para así no poder escuchar la orquesta del secreto. Me dijeron que un día habitaban todo el espacio, pero que con el paso del tiempo un fantasma habitó el castillo y  creyeron ser más felices usando menos habitaciones y ocupando menos espacio. Del castillo entero a tres cuartos y de ahí a la mitad y al final la cuarta parte…

Un día me aventuré y pasé la puerta... El frío gélido, la oscuridad imponente, el miedo en cada rincón y en cada aliento.

Crucé puerta tras puerta, reconociendo habitaciones, si cabe cual más tenebrosa hasta llegar a la última, empujado por una fuerza ajena contra la cual me rebelaba a la vez que amaba, porque ya no cabía el autoengaño ni el escape ni el esperar al futuro incierto.

Allí encontré al fantasma, seguro dispuesto a matarme... Me arrodillé esperando su golpe certero, sabedor de que mi atrevimiento no tenía ya remedio.

Pasaron los segundos y no sentí dolor. No sabía si estaba muerto o vivo.

Abrí los ojos y miré… Ahí estaba el fantasma, impasible, tranquilo.

Con voz dulce me dijo: “Hijo…, sólo soy tu sombra. Ámame a mí también”

lunes, 31 de mayo de 2010

Rutinas, Caminares, Bloqueos


He estado dos semanas de vacaciones, fuera de la rutina habitual, donde uno tiene definidos y estructurados los tiempos para hacer unas u otras cosas y por supuesto, tambien para las caminatas diarias donde uno trata de alguna manera de encuadrarlas dentro de estas rutinas.
Cuando de alguna manera desaparecen estas rutinas y uno se encuentra con situaciones no tan controladas para continuar este trabajo, uno tiene que aprovechar situaciones, ya sea con gente o sin gente para realizarlas. 
Por ejemplo, al visitar un determinado lugar, en el que voy con familia o amigos,  voy con ellos.... pero a la vez trato de estar consciente de mi caminar y de mis sensaciones, tratando de jugar con ello, exagerando el paso, yendo más lento, apartandome un poco... etc. con lo que al final del día... repasandolo, me doy cuenta que he trabajado bastante y aunque no sean caminatas solitarias permiten de alguna manera experimentar continuamente fuera de las rutinas habituales del dia dia.

Lo que si que me ha costado, despues de esos 15 dias, es volver a estructurarme.  De repente me he encontrado con bastantes tareas a realizar y he pasado una semana completamente desorganizado como si me resistiese a volver a entrar en un mundo  rutinario. 
Es curioso, observar ambos contrastes ya que,  aunque era consciente de que me ponía cualquier tipo de excusa para no hacer lo que tenia que hacer.. no era capaz de hacerlo cuando antes era algo normal.
Al final decidí, despues de unos dias... empezar por algo... cualquier actividad y empezar a descongestionarme.

Ahora estoy en ello de nuevo, tratando de, dentro de las rutinas diarias, no volver a caer en bloqueos extraños y aprender de esta experiencia.

Da

viernes, 14 de mayo de 2010

Entierro



Los redobles nos llaman para la gran hora

No es la del ayer ni la del mañana

Esperabas que fuera ahora pero se fue

Cuchillo que vamos afilando en vida:

Hora de morir

La tumba del poeta



Hace poco en el país en que nací se buscaba la tumba del poeta, el que paseando por el campo, en una zona llamada La Asquerosa, con 7 años encontró un ánfora romana y en ella unas monedas. El niño quitó la tierra de la moneda y al ver en ella el reflejo del sol en la esfinge comentó que fue ahí donde por primera vez se dio cuenta de la belleza.

En nosotros habita lo racional, explicándonos con criterio y disimulando nuestro infortunio, pero en lo profundo… encontramos lo simbólico y el puente, en ocasiones doloroso, hacia la gran vida.

Aquel a quien rendimos entierro y recuerdo, aquel a quien ponemos nombre y damos presencia en nuestro corazón con cariño y respeto, aquel que descansa en la Tierra y sabemos donde, sana nuestra psique profunda y abre puertas del cielo en vida.

Sabedores somos que la Tierra de la basura crea flores de colores y aromas para nuestros sentidos.

Sabedores somos que a quien enterramos y recordamos nos ayuda en nuestro destino.

Sabedores somos que sólo honrando nuestras raíces recogeremos buenos frutos.

Sabedores somos que la Tierra es el símbolo del Amor más grande.

Y es que el poeta me recuerda en lo profundo lo que la Tierra enseña.

Es por eso que estoy triste si no puedo regar tu tumba y llevarte unas flores.

¡Cuanto necesitaríamos saber de ti! Tanto, que no miramos la herida que nos produce.

A veces cavo mi tumba y cada semana, como el Marakame me enseñó, duermo dentro de la Tierra, para así aprender a Amar, que es a lo que aquí vine.

¡Ay!, cuantos sueños y noches aún me faltan… cuanta belleza se me escurre entre los dedos…

Desde enero, Federico, te llevo unas moneditas esas noches.

domingo, 25 de abril de 2010

¿se obliga el Sol a salir?


Jamás el Padre Sol se preguntó por la pereza, por el esfuerzo, por el descanso o por el destino de sus rayos.
 
Nunca el Padre Sol se preguntó si alguien le obligó a moverse.
 
Simplemente hace lo que hay que hacer en cada instante, de forma sencilla.
 
En el retiro recordamos la labor del Sol y observamos sus cualidades.
 
¡Qué diferentes de la mente humana convencional!
 
El Sol es el maestro.

El Guru con Bigote

Desde siempre me gustan los Gurus con bigote. No me preguntes porqué porque no quiero saberlo. Así puedo soñar con mi Guru con bigote.

Al Guru con bigote le digo que me encanta su bigote. A él no parece importarle pero tampoco me dice nada contrario.
Al Guru con bigote le digo que es el maestro más impecable que he conocido. A él no parece importarle pero tampoco me dice nada contrario.
Al Guru con bigote le cuento mi vida, lo que no cuento a nadie. A él no parece importarle pero tampoco me dice nada contrario.
Al Guru con bigote recurro muchas veces, cuando estoy sola. A él no parece importarle pero tampoco me dice nada contrario.
Al Guru con bigote le doy consejos sobre lo que creo puede hacer. A él no parece importarle pero tampoco me dice nada contrario.
Al Guru con bigote le entrego mi felicidad para que sea feliz por si acaso él no es feliz. A él no parece importarle pero tampoco me dice nada contrario.
Al Guru con bigote le agradezco que me pusiera todo patas arriba. A él no parece importarle pero tampoco me dice nada contrario.
Al Guru con bigote le hablo de mis grandes conexiones sagradas para que las conozca. A él no parece importarle pero tampoco me dice nada contrario.
Al Guru con bigote le diría lo que me cuentan desde lo más alto, los más grandes, para que él lo sepa. A él no parece importarle pero tampoco me dice nada contrario.
Al Guru con bigote le ofrezco planes de todo tipo en los que él pueda ser partícipe. A él no parece importarle pero tampoco me dice nada contrario.
Al Guru con bigote le muestro mis secretos. A él no parece importarle pero tampoco me dice nada contrario.
Al Guru con bigote trato de convencerle de lo buena que soy para él. A él no parece importarle pero tampoco me dice nada contrario.

… Al Guru con bigote hoy el viento le movió un pelo de su bigote. No pasa nada. A él no parece importarle pero a mí me ha extrañado.
Al Guru con bigote hoy le peinaría su bigote despeinado. A él no parece importarle, amigo del viento, pero yo le quiero peinar el bigote.

 
El viento sopló fuerte hoy y el Guru con bigote se afeitó el bigote con los caballos del viento.  ¡¡ Oh !! ¡ No puede ser ! ¡ No puede ser !

Ya no es un Guru… ¡¡ Un Guru siempre lleva bigote !!  ¡Ea! ¡¡ Mierda de Guru !!

Evitar la propia sombra y encarar el propio Karma.

Auto-Observación


A parte de las Caminatas diarias donde uno tiene que estar atento al Caminar y a su propio cuerpo enfocando la Atención, durante el resto del día también hay que desarrollar la Atención estando pendiente de situaciones cotidianas que nos suceden habitualmente a cada uno.

Se trata de entrenar esta Atención para darse cuenta como funcionan y de que manera estas situaciones habituales nos llegan a condicionar a la hora de vivir un poco menos atado.

Es algo simple y sencillo, pero comenzar a jugar y experimentar con todo ello es a la vez muy efectivo  porque uno comienza a hacer consciente detalles y formas de actuar que están condicionadas por estas "situaciones habituales" de tal manera que entrenándolas diariamente uno aprende a disfrutar y ver la vida de otra manera o al menos uno desarrolla un observador que te acompaña, y que que simplemente trata de estar pendiente y de atestiguar todos estos hechos.

Hoy, por ejemplo, poniendo en práctica este trabajo me he dado cuenta en una situación laboral en la que  estaba esperando mucho en terminar una tarea y he decido que tenia que hacerla ya.  
 
Darme cuenta de manera consciente de esta situación habitual y solucionarla ha hecho que me sintiera bien, liberado y con un peso menos encima.

Simple, Sencillo y Efectivo pero a su vez exige Atención y Trabajo diario.

Toda esta otra  forma diaria de Atención  es parte esencial del Camino del Guerrero.


Da

domingo, 11 de abril de 2010

Escuela del Vacío

Hola amigos:

Escuela del Vacío es un conjunto de métodos prácticos cuyo fin es desarrollar la conciencia del individuo y el autoconocimiento. Consta de diversos talleres y seminarios temáticos centrados en las vivencias y experiencias personales y colectivas que permiten descubrirnos, ampliar nuestra percepción y por tanto, descargar presiones emocionales, condicionamientos, limitaciones para abrir nuevas perspectivas y dimensiones de vida. Son experiencias seguras, sanadoras, no dogmáticas, adaptadas a las circunstancias físicas y emocionales de cada individuo que en todo momento es responsable de cada acto que realiza.
Los principales métodos que forman Escuela del Vacío se centran en desarrollar el caminar consciente (Caminos del Guerrero), la experiencia de conexión interior (Caminos de Silencio), la apertura del cuerpo energético (Las Puertas de la Energía), el desarrollo y estudio del cuerpo energético y la meditación (Ritsu Zen), recuperar arquetipos animales (Juego de los 5 Animales), relacionarse de forma diferente con las fuerzas de la naturaleza (Retiros en naturaleza y peregrinajes), ordenar nuestra memoria y resonar con nuestras metas (Sanar el pasado y volver a la Vida) o aprender a mirarse con perspectiva (El Otro YO).

En este nuevo blog queremos compartir experiencias y enseñanzas sobre estos métodos, en los que los participantes alcanzan mejores relaciones y conocimientos de sí mismos y de los demás.

Cada post del blog pertenece a una etiqueta y ésta a uno de los métodos prácticos: Caminos del Guerrero, Caminos de Silencio, Ritsu Zen, Juego de los 5 Animales, …

Además este año un participante del curso Caminos del Guerrero compartirá con todos algunas de sus experiencias cotidianas en la etiqueta Diario de un Guerrero.

Esperamos que el blog sea un instrumento de comunicación, aprendizaje y compartir. En cada post os animamos a incluir vuestros comentarios y experiencias. 

El fondo del blog se diseña con fotos de nuestra Madre Tierra, Padre Sol y de la sustancia que impregna el universo: el vacío cósmico del cual toma nombre, forma y sentido, no sólo el blog, sino nuestra práctica, enseñanza y nombre de la Escuela ya que Wu Chi alude a la vacuidad, estado natural de la mente liberada. 

Agradecemos a David Martínez y a Enrique Marugán toda su ilusión y esfuerzo por materializar esta nueva idea de una manera tan bella.


Un saludo.
Escuela Wu Chi

sábado, 10 de abril de 2010

La mano que toca el mundo



La bola de Qi empieza en tus manos. Después sale de tus manos.
 
Con los años la bola de Qi se extiende a tu cuerpo.
 
La bola de Qi modula estados, ofrece espejo emocional y transmuta situaciones.
 
Trabajar con esta puerta y sus detalles es esencial para el Ritsu Zen o el Caminar Consciente.
 
Sensei quiso enseñarme algo sobre lenguaje corporal.
 
Se puso de pie y llamo a Kyoko.
 
Sensei tocaba a Kyoko a 1 metro, luego a 2, a 5, a 8 y luego con un sable de madera.
 
Cuando Sensei “tocaba” a Kyoko ella se movía siempre.
 
Sensei nos enseño también a tocar el Cielo y la Tierra.
 
Una vida de práctica, una vida de confianza.
 
Gracias maestro.

El Tigre

El Tigre aquella noche me dijo que el Águila lo comanda todo. En cada lugar el Gran Espíritu se manifiesta en diferentes formas: bosques, mesetas, ríos y valles. Plantas para el calor, para el frío, para la energía, el aliento o la sangre. Lobos o coyotes, osos y ciervos, serpientes y lagartos, buitres y halcones, jaguares o ardillas, animismo del entorno en donde habitan encarnados.

Me salieron la uñas, los bigotes y se abrieron los ojos como nunca. Me mostró donde estuvo, sombra escondida que comandaba una vida de ilusión.

Cada aparición un zarpazo de su garra y lección, muestra, camino, oportunidad para la vida del Yo.

Ahora sé que el Tigre no combate, lo principal es que es consciente de su Aliento.

¡ Qué lejos anda el Yo de la propia Vida !

Naturaleza



No me llevé el libro sagrado para trabajar los elementos.
 
La realidad fue distinta a lo que esperaba.
 
Metí la realidad en mi teoría haciendo todo lo posible por recordar el libro sagrado.
 
Así pude seguir siendo el mismo, el mismo que habla del infinito y del cambio.

Triangular


Quiero alcanzar mayores grados… sobrepasar los 90, momento crítico sin retorno, pero al final siempre añado un lado más al ángulo que soy.
 
De esta manera puedo estar cerrado y mezclarlo todo.
 
De esta manera estoy seguro en mi propia historia personal.
 
De esta manera divido aunque no triunfo.
 
Poco importa escaleno o equilátero, a veces isósceles. Me entretengo en las formas de un ángulo agudo.

Con vergüenza y sin vergüenza


Al inicio trabajamos con demasiada vergüenza escondiendo lo que es obvio enfrente del vacío.
 
Después superamos la vergüenza y así podemos abrirnos al vacío.
 
Ahí nos atascamos… y llega el peligro. El peligro de trabajar sin vergüenza indefinidamente.
 
La responsabilidad nos enseña otro tipo de vergüenza.

Gota a Gota

En mis caminares diarios, suelo tener diferentes momentos, dependiendo de como haya tenido el día.
Son caminatas de Atención donde hay que estar consciente del caminar y del cuerpo.
Si he tenido un día intenso... con mucho trabajo  o muy mental, en las caminatas me suelo acelerar bastante y me cuesta salir de ese estado para volver a la "atención de la caminata".
Estoy aprendiendo lo importante que es autoobservarse estos estados y lo facil que es escaparse "del sentir" al "pensar cotidiano" sin ni siquiera darme cuenta de ello.
Pero de alguna manera, también estoy aprendiendo que hay que ir poco a  poco sin esperar nada y que todos los "momentos de atención y presencia" van sumando como un gotero que va llenando un recipiente gota a gota, paso a paso y que no se trata de conseguir nada... sino de aprender y jugar a estar más presente usando para ello la caminata.


Empiezo a darme cuenta que solo cuando se ha caminado mucho, el recipiente comienza a tener algo de agua, pero para que no se evapore, hay que trabajar a diario y autoobservarse constantemente...

Da.

sábado, 3 de abril de 2010

Re-Encuentro.

Fin de semana largo. Un nuevo comienzo, una nueva continuación. Volver a hacer presente con fuerza en mi vida los Caminos del Guerrero. Estoy contento.

Nos reunimos el grupo antiguo, el nuevo. Se sientan las bases del trabajo de este año. Cenamos. Hay alegría por el encuentro.
Observo las caras de la gente nueva cuando se comenta: "esto es un curso donde no se cuenta casi nada, cada uno mismo tendrá que experimentar y aprender de su propia experiencia y trabajo diario"

"Lo que das es lo que obtienes" es una de las claves del curso.

Las personas nuevas parecen expectantes y tal vez confusas por este método. Me identifico con ellas hace un año. Esa frase para mi fue importante porque implica desde saber acotar lo que uno quiere trabajar hasta tener claro que si uno no se muestra, trabaja sus miedos y sus bloqueos haciéndolo conscientes a uno mismo, el trabajo no será completo...Me gusta recordar de nuevo todos estos detalles este año.

Primer encuentro con el caminar. Ya es un ritual por el que pasamos los Guerreros al iniciar la enseñanza. Campo de Fútbol. Silencio, grupo, caminar. Comienza la experiencia propia. Comienza el juego... No deja de ser un juego en el que vas a jugar contigo mismo y es importante dejarse llevar... confiar. Este segundo año, lo veo más claro, la confianza es importante, mostrarse y acotar también. Serán los pilares de mi trabajo.

Al día siguiente salimos todo el grupo a la montaña. Es la misma montaña y el mismo lugar del año pasado, aunque vamos por otro sitio. Si el viernes estaba contento, hoy al comenzar me encuentro descolocado, raro, revuelto por dentro, la respiración desacompasada con el caminar. Me cuesta centrarme y me despisto fácilmente. Es como si mi cuerpo se resistiera a volver a este trabajo. No lo acabo de entender. Simplemente lo registro y lo dejo ahí. Trato solo de observarlo, sin castigarme por ello. Es una de las cosas que aprendí el año pasado. Todo está bien.... Aun así, en este estado, la cuesta que estamos subiendo, no me parece empinada. La fuerza del grupo, es importante en este momento. Solo tengo que caminar detrás de mi compañero y dejarme llevar. He aprendido que el "paso a paso" es importante y en eso confío.

Practicamos los caminares, el caminar en ciempies hace que la maquinaria del grupo comience a engrasarse....
Hay un ejercicio que en cierta manera me vincula de nuevo y me centra más en el trabajo: "Sentir la Tierra", es una llamada a encontrarme conmigo mismo y provoca en mi, que de alguna manera, me sienta renovado, relajado y más centrado. Mi cabeza loca se ha relajado. Ya no aparecen tantos pensamientos que me sacan del caminar y ahora todo fluye mucho mejor.

Practicamos la "Confianza Ciega" con un compañero, el es mi guia y yo me dejo llevar. Aprendo a confiar... a sentir... total nada puede pasarme... Este trabajo amplifica la sensación en la pisada, en su tacto, en el aire en el escuchar, en el caminar... cuando terminamos me siento relajado y tengo la sensación de que el tiempo se ha distorsionado... pero ahí estamos todos... el grupo, la Madre Tierra.

El resto de las practicas incluyen otros tipos de caminares, caminar de fijación, caminar en pareja sincronizando movimentos..... en los que uno descubre lo importante que es la ATENCION y que cualquier descuido te saca de ese estado... notando una desarmonía rápidamente... pero la fuerza y la unión del grupo hace que vuelvas y que no te pierdas demasiado. 
 
Siempre trato de comparar estos trabajos de grupo a cuando camino a solas, en la que a veces un descuido hace que tu mente se pierda divagando y tardes bastante tiempo en darte cuenta de que "te has ido"... pasando demasiado tiempo hasta que retomas la práctica, pero el trabajo en grupo hace que recuperes mucho más rápido la atención.
 
Para terminar, llegamos a una cascada.... paramos delante de ella; toca sentir y trabajar con el elemento Agua. Es un buen colofón al dia. Estoy sentado delante de ella. El poder del agua y su estruendo al caer me hacen sentir bien. Es lo más parecido a estar solo en el PRESENTE. Escuchando ese sonido tan potente de el agua al caer hace que ni siquiera tenga importancia en ese momento la caminata del día... todo se desvanece en un instante y disfruto de ello tratando de grabar ese instante en mi cuerpo.
 
Da.

viernes, 2 de abril de 2010

Desandando el camino andado

Dia
Antes de Caminos de Guerrero mi vida había sido una constante búsqueda en la que  había leído muchos libros, escuchado muchas teorías, conocido a personas interesantes y cultas, asistido a cursos... pero todo ello siempre basado en la escucha, en lo mental, en el recibir sin experimentar o sin experimentar demasiado, por lo que  en cierta manera existía un vacío en  mi ... ya que todo eso quedaba muy cojo y faltaba algo importante: experimentar, sentir, constancia y práctica.

Mi trabajo en Caminos del Guerrero en el año 2009, supuso el comenzar a  tomar conciencia de varias aspectos importantes:


- Dejar de lado todo lo anterior hasta ese momento. No porque fuera malo, sino porque, de alguna manera me iba a condicionar en este trabajo al estar buscando encajar lo experimentado en lo leído o aprendido, de tal manera que hacerlo así, me creaba confusión o cierta dispersión.
- Lo simple funciona muy bien: basta con caminar, de manera consciente sobre la tierra. Sin expectativas, con amor y respeto y siguiendo unas técnicas sencillas.
- Constancia en el trabajo diario: por un lado Caminatas Diarias y por otro aprender a crearme un observador que intenta estar pendiente de uno mismo y de los demás para detectar a diario situaciones cotidianas que influyen mucho a la hora de vivir y afrontar la vida.
- La importancia del Silencio y estar en el Presente.
- Para "mover Energía" es necesario saber acotar que es lo que se quiere trabajar. Aunque somos conscientes de lo que queremos, cuesta articularlo con palabras y darle forma para no acabar perdiéndonos en vaguedades ambiguas.
- Tomar conciencia de que somos seres diminutos que pisamos sobre la Madre Tierra, la cual nos ve nacer y nos acoge, nos da cobijo, nos da de comer, nos cuida...y hemos de estar agradecidos siempre por ello y tenerlo presente a diario. Crear ese vinculo con la Madre Tierra es importante.
 
Por todo la anterior y como integrante del nuevo grupo de "Caminos del Guerrero 2010" decidí en este trabajo ir compartiendo algunas partes de mi experiencia en este blog a modo de diario donde  dejaré entreveer el proceso que estoy siguiendo, contando pero sin contar, de tal manera que sea el lector el que se haga una idea global de en que consiste este trabajo a lo largo de los 5 meses siguientes.

Desandando el Camino Andado. Aprendiendo a experimentar por mi mismo.


Da. 
 

lunes, 22 de marzo de 2010

Tolerancia

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Pasado el tiempo aprendemos a tolerar a otros.

De este modo a pesar de lo que el otro haga o diga, le permitimos hacer y ser.

 Al ser tolerantes sonreímos y evitamos problemas, cedemos espacios fuera para que todos estén incluidos.

Sin embargo tolerar no evita el juicio, ni la distancia, ni la etiqueta sobre el prójimo o sobre los acontecimientos.

Tolerar es una medida externa en un interior que sigue juzgando, esto es, midiendo, con la mente que compara, entre lo que Es y lo que Debería Ser, entre el mundo propio cargado de razones y la Realidad cargada de evidencia.

La razón es tan poco razonable que se permite superar a la evidencia.

Tolerancia, vuelta del Samsara, máscara evidente de la arrogancia.

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viernes, 12 de marzo de 2010

Amor de Mercader

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En muchas ocasiones un Guerrero vuelve al Mercader. Y en gran parte de ellas lo hace en nombre del amor. El Guerrero se busca, se pregunta por la naturaleza de los fenómenos, duda de sus creencias, pone a prueba sus virtudes y durante un tiempo, hasta que forma parte de su naturaleza, se mantiene en lucha interna, sin descanso, jugando consigo mismo, desidentificándose, soltando lastres, aprendiendo a sanar heridas, instalando la tan ansiada práctica, descubriendo el valor del compromiso, recuperando una visión de un pasado a la vez que experimentando que todo pasado es, en sí mismo, vacio..

En ese camino practica, camina, entrena, medita, se estira, se encuentra con otros con lo que comparte intento. Aconseja poco, no manda a sus amigos escritos de otros, sino que por fin confía sobre todo, en su propia experiencia, sin mediadores ni teorías previas, sin dogmas ni culturas, sin gurus ni idolatrías, sin brujos ni libros… sólo consigo mismo y las experiencias vividas.

En ocasiones llega la pareja, el hij@, la casa…, disfrazadas en nombre del amor… pero aparecen también para probar su entendimiento.

En ese momento crucial, donde puede dar un gran salto, el Guerrero puede perder la atención y, ésta, por definición, se escapa cuando aparece el deseo.

Entonces, inventa un pasado de atracción o de olvido, engaña al presente, proyecta una imagen ficticia de sí mismo y del otro y busca como resultado final, un futuro pactado, cerrado, seguro, a dos, encarcelados en la seguridad ajena al cambio constante.

Preso de la arrogancia sus palabras niegan la seguridad pero sus hechos lo confirman. Se encierra en una jaula y amor de jaula es amor que comprime, amor de mercader.

El antes Guerrero ya no camina tanto, practica o medita. Jamás llegó a tener una práctica intensa, constante, asidua, paciente, serena, sobria, íntima con el Espíritu. Pero ahora ya ni la anhela.
Si indaga, lo hace a cambio de que su pareja también lo haga. Si su pareja no camina, él ya no camina. Ya ha llegado a su meta, ya puede condicionar su búsqueda y la del compañer@. Ya puede dejar de experimentar lo que necesita saber antes de morir.

Antes sólo tenía que vencer sus propias resistencias, condicionamientos, sombras y karmas, ahora además los de su compañer@. Doble trabajo, menos posibilidades de éxito… todo en nombre del amor.

Cuando la pobreza entra por la puerta, el amor, Amor Brujo claro, salta por la ventana