Jamás el Padre Sol se preguntó por la pereza, por el esfuerzo, por el descanso o por el destino de sus rayos.
Nunca el Padre Sol se preguntó si alguien le obligó a moverse.
Simplemente hace lo que hay que hacer en cada instante, de forma sencilla.
En el retiro recordamos la labor del Sol y observamos sus cualidades.
¡Qué diferentes de la mente humana convencional!
El Sol es el maestro.
Nunca el Padre Sol se preguntó si alguien le obligó a moverse.
Simplemente hace lo que hay que hacer en cada instante, de forma sencilla.
En el retiro recordamos la labor del Sol y observamos sus cualidades.
¡Qué diferentes de la mente humana convencional!
El Sol es el maestro.
El Padre Sol no puede escapar, no puede elegir. Maravilloso, fuente de vida, pero esclavo.
ResponderEliminar¿elegir?
ResponderEliminarNunca me sentí esclava por tener que respirar para vivir. ¿Acaso habrá llegado el momento de planteármelo?
ResponderEliminarSusana: el sol se mueve por fisica. Olvidate, nunca podrias ser una piedra ardiendo. Eso si, planteate lo que quieras... siempre que no te hagas daño.
ResponderEliminar¿Puedo yo moverme ajena a las leyes de la física?
ResponderEliminarPuedes, con el cuerpo y con el alma.
ResponderEliminarSusana:
ResponderEliminarCon el cuerpo la verdad es que no lo se. Pero con el alma puedes crear la fisica, ser la fisica.